Basándonos en los estudios realizados por la universidad de Harvard y distintos expertos que adjuntamos los enlaces a sus publicaciones.
La renovación de aire se puede denominar por sus siglas en inglés ACH, Air Changes per Hour. Si un espacio tiene 1 ACH (1 renovación de aire por hora) significa que en una hora entra en la sala un volumen de aire exterior igual al volumen de la sala, y, debido a la mezcla continua del aire, esto resulta en que el 63% del aire interior ha sido reemplazado por aire exterior. Con 2 renovaciones se reemplaza el 86% y con 3 renovaciones el 95%.
La ventilación necesaria para reducir el riesgo de contagio depende del volumen de la sala, el número y la edad de los ocupantes, la actividad realizada, la incidencia de casos en la región y el riesgo que se quiera asumir. La guía de Harvard recomienda 5-6 renovaciones de aire por hora para aulas de 100 m², con 25 estudiantes de 5-8 años, y establece esta clasificación:
- 6 ACH Ideal
- 5-6 ACH Excelente
- 4-5 ACH Bueno
- 4-3 ACH Mínimo
- <3 ACH Bajo
En nuestro caso estos valores se reflejan en la tabla 1, que se adjunta con los datos definidos en la “guía para ventilación de aulas.
En la mayoría de los centros escolares no se conoce la tasa de ventilación ACH. Por eso es importante contar con otras formas de evaluar indirectamente, a través de la concentración de CO2, si la ventilación es adecuada.
En algunos casos, mantener la puerta y alguna ventana abierta que favorezca la ventilación cruzada, es suficiente. Por eso disponer de dispositivos de medida de CO2 ofrecería una valoración más objetiva.
La concentración de CO2 en exteriores ronda los 400-420 ppm (partes por millón), lo que quiere decir que, por cada millón de moléculas de aire, 400-420 son de CO2. Se considera que una estancia está bien ventilada cuando la concentración de CO2 es de 800-950 ppm. Si el valor está por encima, se considera que la estrategia de ventilación es insuficiente. Estos valores han sido los propuestos por la Escuela de Salud Pública de Harvard, quienes han elaborado una guía en cinco pasos para garantizar la ventilación; la UC Berkeley, que también ha publicado recursos sobre este tema; o el CSIC, guía para ventilación de aulas.
La ventilación en nuestras aulas, en las condiciones que trabajamos siguiendo el protocolo de ventilación, da valores por debajo de los referidos anteriormente, con lo que nos hace pensar que vamos por el buen camino (todo abierto incluso en invierno) en la mayoría de los casos.
Si en una estancia hay 800 ppm de CO2 significa que el 1% del aire que respiramos ya ha sido respirado antes por alguien. Si son 2400 ppm, el 5% del aire que respiramos ha sido exhalado antes. Inhalar el aire que otros han exhalado es una vía de contagio. Por eso se recomienda mantener el CO2 siempre por debajo de 800 ppm. Para actividades que generen muchos aerosoles, como coros, ejercicio aeróbico, instrumentos de viento, o que impliquen hablar muy fuerte o gritar, lo ideal es mantener el CO2 a 500 ppm, que sería lo más próximo a estar al aire libre.
Estudio de los niveles de CO2 óptimos para la salud
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1111/j.1600-0668.1999.00003.x
Guía para la ventilación de aulas CSIC
https://www.adideandalucia.es/documentos/infeducativa/guia_para_ventilacion_en_aulas_csic2020.pdf
Guía para la ventilación de las aulas por la Universidad de Harvard.
5 Step Guide to Checking Ventilation Rates in Classrooms
El muestreo de mediciones realizado en centros educativos por el Comité de Expertos en Ventilación del COGITI, confirma la necesidad de contar con medidores de CO2
Cómo cuantificar la tasa de ventilación de un espacio interior utilizando un monitor de CO2 asequible
Con la situación producida por la pandemia del COVID-19 y según recientes estudios el contagio del virus se produce mayoritariamente por lo aerosoles expulsados en la respiración, como podemos ver en este documento:
En el año 2018 con la gripe actualiza los conocimientos actuales sobre la transmisión de patógenos por vía aérea y la mejora de la eficiencia de la ventilación con respecto a la prevención de infecciones.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6072925/
Otro estudio en el 2019 con la gripe, “Aumentar la ventilación hasta los niveles recomendados tuvo el mismo efecto mitigador que una cobertura de vacunación del 50% al 60%.”
https://www.nature.com/articles/s41598-019-38825-y
Existen además evidencias de que los altos niveles de CO2 influyen sobre el rendimiento de los alumnos en el aula.
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25117890/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26317643/
y también sobre los profesores
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/24920413/
Un estudio de la Universidad de Sevilla señala que del nivel de CO2 presente en las aulas analizadas supera habitualmente el valor máximo recomendado por la Organización Mundial de la Salud
CO2 Concentration and Occupants’ Symptoms in Naturally Ventilated Schools in Mediterranean Climate. Jesica Fernández-Agüera, Miguel Ángel Campano, Samuel Domínguez-Amarillo, Ignacio Acosta y Juan José Sendra. Buildings 2019, 9(9), 197
Indoor Comfort and Symptomatology in Non-University Educational Buildings: Occupants’ Perception. Miguel Ángel Campano-Laborda, Samuel Domínguez-Amarillo, Jesica Fernández-Agüera, and Ignacio Acosta. Atmosphere 2020, 11(4), 357